Y más con este calor horrible, o quizá porque era una serie que solían reponer las noches de verano y por eso me he vuelto a acordar de Doctor en Alaska.
Me encantaba Doctor en Alaska, una serie coral, original, surrealista y refrescante situada en un pequeño pueblo dónde cualquier cosa podía pasar y todos encontraban su lugar. Un locutor de radio ex presidiario, filósofo y poeta, un antiguo astronauta republicano y conservador, el propietario de un bar y su pareja, Shelly, Miss Paso del Noroeste y que podría ser su nieta, o Ed, un joven nativo que no conoció a sus padres y fue criado por la tribu y que quiere ser director de cine...
Y Joel Fleischman, claro. Joel es el doctor, judio, urbanita, neurótico y amargado por estar echando a perder su prometedora carrera en Cicely. Joel se benefició de una beca y ahora tiene que compensar a la comunidad ejerciendo como médico en una pequeña consulta con la única ayuda de la imperturbable Marilyn.
Era muy bonita Doctor en Alaska, no solo por Fleischman y O´Connell. Tenía algo especial. Cicely era un lugar utópico y mágico. Lo mismo podías echar una partida con un ajedrecista campeón mundial, escuchar a un famoso violinista o descubrir una noche cualquiera a la vuelta de una esquina un abarrotado restaurante italiano. Fleischman y O´Connell tenían también ese no sé qué, que brilla sin necesidad de palabras, y eso que no eran las palabras lo que les faltaban a ninguno de los dos, siempre estaban discutiendo... Durante las cinco temporadas que Fleischman, Rob Morrow, aguantó en la serie tuvieron tiempo para todo, pero no terminaron juntos, para variar (no sé por qué mis parejas favoritas nunca terminan juntas...), pero fue bonito mientras duró y yo aun me acuerdo de ellos.
Así que qué me decís, ¿os mudabais a Alaska? Aunque sea solo hasta septiembre...
Ay, Ari... yo esta no la vi!! en realidad no soy de seguir muchas series, al menos, últimamente... me canso de tooodas!! empiezan gustandome muuucho, peeero luego, no sé... será cosa mía, que soy muuuuy rara!!
ResponderEliminarEn cuanto a lo de que si me mudaría a Alaska, creo que nooo... y mira que ya estoy un "pelín" harta de verano... ni calor, ni frío, un término medio, por favoooor!! Nah!! yo siempre pidiendo imposibles...
No terminaron juntos??? vaya por Dios... me están entrando unas ganas tremendas de ver esta serie ;)
Besicos y cuídate del calor!!
Era un poco tramposa la serie porque en ese pueblo siempre era primavera :P Está bien para verla así salteada una de estas noches de verano, Silvia. Cuídate tú también que este calores nos van a desmantelar...
Eliminar¡Hola!
ResponderEliminarHacía mucho que no veía esta serie y me has traído muchos recuerdos. Hace poco comencé a ver Men in trees y le saqué bastante parecido.
He encontrado tu blog y me ha encantado, pásate por el mío cuando quieras.
¡Muchos besos! :3
Pues yo no he visto Men in trees pero he oído hablar muy bien de ella y también había oído comentar el parecido, a ver si le echó un ojo, Karou y ahora echaré un ojo también a tu blog :) Gracias por pasar!!!
Eliminar¡Gracias por pasarte! Te he nominado en mi blog, hazlo solo si tu quieres :3
Eliminarhttp://chicaentrelineas.blogspot.com.es/2013/07/estoy-nominada.html
Besos.